A mucha gente le encanta ir a una clase de spinning. Como todas las actividades que se realizan en un gimnasio, se trata de una actividad con un gran componente social. Pero no todo el mundo lo ve de la misma forma.
Algunos deportistas sólo van al gimnasio precisamente por el spinning, de manera que si pudieran hacerlo en casa, lo preferirían. Lo malo es que hasta el momento no era posible debido al coste y a los recursos necesarios. Sin embargo, esta situación ha cambiado.
Las bicicletas de spinning han rebajado considerablemente su precio. Si antes una profesional costaba 1.000 euros, esa misma sigue costando ese importe, la novedad es que hay modelos igual de útiles, que cuestan una cuarta parte.
¿Por qué se reduce el precio?
Las bicis de spinning cuestan menos porque la oferta y la demanda se han incrementado notablemente. Los aficionados han crecido tanto que ahora ya hay mucho público que quiere su bici de spinning en casa. Y las empresas no se han quedado paradas esperando que pasase esta oportunidad, sino que han creado infinidad de modelos domésticos.
Por otro lado, los componentes de fabricación de una bici de spinning casera son menos resistentes y costosos que los de una bici que es utilizada a diario, varias veces, por personas de diversa constitución. Esto permite que los precios se reduzcan muchísimo, así como al mismo tiempo se incrementa la vida útil de esta máquina.
En lo relativo a los recursos, ahora mismo ya hay muchas clases de pago y gratuitas distribuidas de forma digital. Dependiendo de la pericia y experiencia del deportista, estas clases serán más o menos útiles. Los más experimentados sólo necesitarán prepararse una sesión o puede que incluso sean capaces de adaptarse a la música que le acompañe en cada momento.
Algunos deportistas sólo van al gimnasio precisamente por el spinning, de manera que si pudieran hacerlo en casa, lo preferirían. Lo malo es que hasta el momento no era posible debido al coste y a los recursos necesarios. Sin embargo, esta situación ha cambiado.
Las bicicletas de spinning han rebajado considerablemente su precio. Si antes una profesional costaba 1.000 euros, esa misma sigue costando ese importe, la novedad es que hay modelos igual de útiles, que cuestan una cuarta parte.
¿Por qué se reduce el precio?
Las bicis de spinning cuestan menos porque la oferta y la demanda se han incrementado notablemente. Los aficionados han crecido tanto que ahora ya hay mucho público que quiere su bici de spinning en casa. Y las empresas no se han quedado paradas esperando que pasase esta oportunidad, sino que han creado infinidad de modelos domésticos.
Por otro lado, los componentes de fabricación de una bici de spinning casera son menos resistentes y costosos que los de una bici que es utilizada a diario, varias veces, por personas de diversa constitución. Esto permite que los precios se reduzcan muchísimo, así como al mismo tiempo se incrementa la vida útil de esta máquina.
En lo relativo a los recursos, ahora mismo ya hay muchas clases de pago y gratuitas distribuidas de forma digital. Dependiendo de la pericia y experiencia del deportista, estas clases serán más o menos útiles. Los más experimentados sólo necesitarán prepararse una sesión o puede que incluso sean capaces de adaptarse a la música que le acompañe en cada momento.
ConversionConversion EmoticonEmoticon