El estudio anatómico y su desarrollo están bien documentados. Sin embargo, la práctica diaria de ir al gimnasio y compartir experiencias con otros deportistas, motiva la creencia de ciertas “normas” no escritas, que al final no son más que mitos infundados o certezas de las que se desconoce la veracidad. Te resolvemos algunos de los más populares:
“Para quitarse la grasa abdominal solo sirven ejercicios aeróbicos”
Totalmente cierto. Es más, tienes que conseguir quemar calorías y conseguir un déficit calórico, por lo tanto deberás combinar tanto una dieta baja en calorías como ejercicios que las consuman.
“No tomes bebidas de frutas y vegetales, es mejor comerlos”
No sufras, puedes tomar bebidas de frutas y vegetales y aprovechar todas sus propiedades. De hecho, hay personas que consiguen un mejor rendimiento con el jugo de las frutas y los vegetales, en lugar de comerlas, ya que prescinde de elementos como fibras o azúcares.
“Si comes huevo, evita la yema, solo es grasa y colesterol”
Si tomas huevo, no te prives de nada. La yema es la parte más saludable y con mayor cantidad de nutrientes. Además, no existe ninguna demostración científica que relacione su consumo con el colesterol y otras enfermedades cardíacas que se le relacionan.
“Si tomas sal en tu dieta te subirá la presión”
Este mito afecta sobre todo a los no deportistas. Al poco de iniciar una dieta y hacer ejercicio se demuestra su poco acierto. La sal no desarrolla hipertensión. Sin embargo, el sobrepeso sí que lo provoca. El hecho de que muchas personas con sobrepeso consuman una dieta rica en sal, ha hecho pensar en su relación.
“Hacer sentadillas es malo para las rodillas”
Nunca creas esta afirmación. Las sentadillas refuerzan la cadera y las piernas, hasta permiten proteger las rodillas frente a dolores de diferente tipología. Sin embargo, hacerlas correctamente, como cualquier ejercicio, es esencial para evitar lesiones.
“Para quitarse la grasa abdominal solo sirven ejercicios aeróbicos”
Totalmente cierto. Es más, tienes que conseguir quemar calorías y conseguir un déficit calórico, por lo tanto deberás combinar tanto una dieta baja en calorías como ejercicios que las consuman.
“No tomes bebidas de frutas y vegetales, es mejor comerlos”
No sufras, puedes tomar bebidas de frutas y vegetales y aprovechar todas sus propiedades. De hecho, hay personas que consiguen un mejor rendimiento con el jugo de las frutas y los vegetales, en lugar de comerlas, ya que prescinde de elementos como fibras o azúcares.
“Si comes huevo, evita la yema, solo es grasa y colesterol”
Si tomas huevo, no te prives de nada. La yema es la parte más saludable y con mayor cantidad de nutrientes. Además, no existe ninguna demostración científica que relacione su consumo con el colesterol y otras enfermedades cardíacas que se le relacionan.
“Si tomas sal en tu dieta te subirá la presión”
Este mito afecta sobre todo a los no deportistas. Al poco de iniciar una dieta y hacer ejercicio se demuestra su poco acierto. La sal no desarrolla hipertensión. Sin embargo, el sobrepeso sí que lo provoca. El hecho de que muchas personas con sobrepeso consuman una dieta rica en sal, ha hecho pensar en su relación.
“Hacer sentadillas es malo para las rodillas”
Nunca creas esta afirmación. Las sentadillas refuerzan la cadera y las piernas, hasta permiten proteger las rodillas frente a dolores de diferente tipología. Sin embargo, hacerlas correctamente, como cualquier ejercicio, es esencial para evitar lesiones.
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