La rutina de un entrenamiento continuo permite ir mejorando nuestro estado de forma constantemente y alcanzar los objetivos propuestos o acercarnos a ellos. Sin embargo, hay días en los que nuestro estado de forma se resiente, tanto por factores internos como externos. Y a veces, este decaimiento se convierte en una tendencia que nos sugiere parar y analizar la situación.
Igual de preciso que el cuerpo humano, la economía mundial también precisa de una ejercitación continua para estar en forma. Pero lo sucedido estos últimos días con el dólar sólo han mostrado que en base algo fallaba. La consecuencia es que el dólar pierde forma y, en consecuencia, retrocede respecto al resto de divisas internacionales.
Factores internos y factores externos afectan al mismo tiempo al dólar para haber obtenido un bajo rendimiento como éste. A nivel interno, el pasado martes se conocieron datos de la actividad manufacturera de Estados Unidos. El aumento esperado en agosto llegó, pero a un ritmo sensiblemente menor de lo que se creía, para ser más concretos, hacía dos años que no crecía de forma tan lenta.
Internacionalmente la situación es ampliamente conocida, las bolsas de China están en un descenso como hacía años no vivían y el crecimiento sospechado de su industria queda en entredicho. Como es lógico, a toda la economía mundial (no sólo a la divisa estadounidense) esta situación le afecta directamente.
De la misma forma que sucede con el entrenamiento, cuando unas rutinas presentan declive, los objetivos son más difíciles de alcanzar. Es lo mismo que piensan actualmente los inversores, temerosos de que la promesa desde la Reserva Federal de Estados Unidos de subir los tipos de interés no se produzca a tan corto plazo como se esperaba.
No obstante y por mucho que les pese a los inversores, en este momento no se debe mirar el horizonte, si no la pared más cercana, actuar sobre la situación y resolver los problemas a corto plazo, para más tarde redefinir si es preciso los objetivos finales.
Por eso, el informe sobre empleo que Estados Unidos ya debería haber presentado es absolutamente primordial para obtener una visión positiva que permita una renovación alcista.
De la misma forma que sucede con el entrenamiento físico, en las divisas internacionales es imprescindible contar con un entrenador que pueda indicarte cómo actuar en cada situación. IronFX es una empresa que puede darte ese servicio. La dilatada experiencia de IronFX en el sector Forex de divisas internacionales y su capacidad de obtención de información le permiten ayudarte a tomar las mejores decisiones en cada inversión, en busca de un objetivo claro de beneficio económico.
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